jueves, 26 de abril de 2007

LAS CABAÑAS NORUEGAS

Hay que empezar a instruir a los españoles en el concepto cabaña noruega. A mi en principio me suena a cabañuca de madera, en medio del bosque, sin electricidad o agua corriente. Son de madera, y hay muchas que están en medio del bosque; pero de cabañuca tienen muy poco y están llenas de comodidades tipo lavaplatos, lavadora, secadora, microondas, calefacción en el suelo, chimenea, etc., etc., etc.

La semana pasada fuimos a la cabaña de la empresa. Agresso tienes una a disposición de los empleados, dado que somos unos cuantos, y hay demanda, la asignación se hace por sorteo; pero mira tú, el finde pasado me tocó.

Como podéis observar, el estatus es bastante conveniente:










Nos hemos pasado el finde goposhiando, el sábado hizo un día espectacular, sol radiante, nada de frío, y nieve para aburrir. Hay que decir que después de 22 kilómetros, yo acabé que no podía con mi alma :-)

Lo malo es que se nos olvidó la cámara así que no tengo documento gráfico del momento, pero por lo menos hay algunas fotucas del domingo.



martes, 17 de abril de 2007

LA EDUCACIÓN DE LAS VISITAS

El protocolo a seguir durante las visitas a casa de amigos, familiares o conocidos requiere cierto tiempo de aprendizaje.
Protocolo inicial:
Nada más llegar, o encontrarte con el sujeto en cuestión, le dices "gracias por la última" (takk for sist). No importa si "la última" fue ayer, hace dos, o hace diez años, lo importante es dar las gracias por la última vez que te viste. (Desde luego que yo me vaya a acordar de en qué consistió "la última" cuando hayan pasado diez años, será francamente muy poco probable, pero en fin, habrá que disimular).
La conversación gira de la siguiente forma, según te abren la puerta takkeas for sist, el que te recibe te takkea for sist, tu acompañante takkea for sist, el que recibe vuelve a takkear for sist... Y así te pasas un ratito entretenido en la puerta, venga de agradecer y de agradecer.
Éste es un buen momento para aprovechar a quitarse los zapatos, así matas dos pájaros de un tiro, y luego ya puedes entrar tranquilamente (*).
Protocolo final:
Conviene empezar a irse con tiempo suficiente, hay que dejar cierto tiempo para takkear por la comida, takkear por la visita, takkear por habernos tenido en casa, takkear por las flores, vino, tarta o regalo similar que hayas traido, etc., etc., etc... ¡Aparte de para ponerse los zapatos, cazadoreas, gorros, guantes y bufandas necesarios para poder salir a la calle y no morirse de frío!
Menos mal que ya se están acabando los fríos polares y ahora ya se puede salir sin parecer un hombre michelín.


Por último, Es importante acompañar el repertorio de takks variados con una especie de medio abrazo. No te das ni un beso, ni un par de besos, ni un abrazo... Acercas las mejillas, ligeramente, y medio pasas el brazo por el hombro contrario, ligeramente también... Te abrazas, pero pocko, es fundamental dejar un GRAN ESPACIO VITAL entre tú ser humano y el ser humano que tienes en frente.
Para este menester conviene aprender la lección de barrio sésamo sobre cerca y lejos, estoy convencida de que hay una versión escandinava y una versión latina sobre el mismo capítulo.


-----------------------------------------------------------------------------------------------
(*) Nota: Los noruegos son como los japoneses, en casa andan descalzos. Así que todo el repertorio de saludos y abrazos se hace mientras te levantas y te agachas quitándote los zapatos y demás prendas de abrigo.
Si esto se hace en una casa de 42 m2 con un pasillo mínimo, os podeís imaginar lo cómodo que resulta.